miércoles, mayo 31, 2006
lunes, mayo 29, 2006
para que una noche sea distinta
1. Olvidate que la noche es el final del día.
2. Cambia el valor atribuido a la noche de que es para descansar.
3. Busca entre todos tus sueños que nos has cumplido y piensa únicamente en el principio de uno de ellos y, sólo el principio -no más-, empiezalo hoy (asegurate de que no sea un sueño que requiera de horario matutino).
4. Busca entre todos tus tesoros, entre todas las riquezas, una que sepas que no terminará esta noche y celébralo esta noche.
5. No tiene que ser un día especial, olvídate de que el calendario guie tu memoria y tu asombro: hoy es un día especial por el simple hecho de que estamos vivos y pagamos la renta)
6. Piensa simple y sencillamente que esta noche será irrepetible, aunque veas que todo permanece igual...tu mirada es la que uniformiza cada instante.
7. Haz lo necesario para no agotar tus energías, conservalas como aquellas veces, de niña, no querías comer en las fierstas familiares para comer mucho a la hora de la fiesta. Y, también como niña, alimenta la ilusión de llegar a la noche y ser libre de hacer lo que quieras, inclusive de no hacer nada.
8. Piensa que ésta noche puede ser la última, de hecho lo será si piensas que cada día es algo que no recuperarás jamás.
9. Y para finalizar, búscate a un compañero con quién compartir esta noche, dile que hoy decidiste que ésta noche es para ti especial porque no la supeditarás a un horario (en el fondo, siempre estás guardandote para un mejor momento, una ocasión especial que tal vez nunca llegará). Búscate a alguien para celebrar esta noche, que te deje ser tú, con quien te la pases tan bien que no receurdes quién eres. Búscate a alguien aunque esa persona no sea yo.
2. Cambia el valor atribuido a la noche de que es para descansar.
3. Busca entre todos tus sueños que nos has cumplido y piensa únicamente en el principio de uno de ellos y, sólo el principio -no más-, empiezalo hoy (asegurate de que no sea un sueño que requiera de horario matutino).
4. Busca entre todos tus tesoros, entre todas las riquezas, una que sepas que no terminará esta noche y celébralo esta noche.
5. No tiene que ser un día especial, olvídate de que el calendario guie tu memoria y tu asombro: hoy es un día especial por el simple hecho de que estamos vivos y pagamos la renta)
6. Piensa simple y sencillamente que esta noche será irrepetible, aunque veas que todo permanece igual...tu mirada es la que uniformiza cada instante.
7. Haz lo necesario para no agotar tus energías, conservalas como aquellas veces, de niña, no querías comer en las fierstas familiares para comer mucho a la hora de la fiesta. Y, también como niña, alimenta la ilusión de llegar a la noche y ser libre de hacer lo que quieras, inclusive de no hacer nada.
8. Piensa que ésta noche puede ser la última, de hecho lo será si piensas que cada día es algo que no recuperarás jamás.
9. Y para finalizar, búscate a un compañero con quién compartir esta noche, dile que hoy decidiste que ésta noche es para ti especial porque no la supeditarás a un horario (en el fondo, siempre estás guardandote para un mejor momento, una ocasión especial que tal vez nunca llegará). Búscate a alguien para celebrar esta noche, que te deje ser tú, con quien te la pases tan bien que no receurdes quién eres. Búscate a alguien aunque esa persona no sea yo.
viernes, mayo 26, 2006
poeta? no...peatón
Sigo caminando por las calles. Me sigo tropezando con los rostros de la miseria, de los marginados del octavo pecado capital: la prepotencia.
Sigo caminando entre todas las ambivalencias. Soy y me reconozco el más absurdo de los anónimos que caminan con la coraza de capitalino a flor de piel. Un garabato, una incógnita, un fantasma que se sacude polvo gris. Soy un dios en harapos, colgado de los hilos del desasosiego. Un principe perdido. Nadie sabrá quién soy.
La vida duele tanto cuando entra por los ojos.
La verdad es un terrible golpe en la cabeza.
La memoria viene de píe en el metrobus y a esta anciana nadie le cede el asiento.
Sigo caminando entre todas las ambivalencias. Soy y me reconozco el más absurdo de los anónimos que caminan con la coraza de capitalino a flor de piel. Un garabato, una incógnita, un fantasma que se sacude polvo gris. Soy un dios en harapos, colgado de los hilos del desasosiego. Un principe perdido. Nadie sabrá quién soy.
La vida duele tanto cuando entra por los ojos.
La verdad es un terrible golpe en la cabeza.
La memoria viene de píe en el metrobus y a esta anciana nadie le cede el asiento.
jueves, mayo 25, 2006
principio de soberanía emocional
NO se es libre cuando se piensa que todo lo que nos pasa es provocado por todo menos por nosotros mismos.
las 7 alcantarillas
Y sabremos que nuestro derecho a réplica ante el argumento de Dios, es ésta existencia en la que nadie nos enseño a vivir.
Estas 7 pequeñas maravillas que no son más que recovecos de las esquinas donde nunca sabremos doblar, esas esquinas en la que se nos cuelga la sonrisa. En la ciudad desnuda que nunca terminaremos de conocer.
Somos humanos y seres divinos de un Edén que no sabemos dónde quedó. Exiliados de nuestro propio secreto. Complejos, con tantas ideas, con pocas herramientas para hacerlas claras, pero si con herramientas que nos habrán de matar sofisticadamente...nuestras pasiones son siempre encaminadas a nuestra propia destrucción, ya sabes: "todo lo que nos hace bien nos hace mal"...somos necios, narcisistas, hedonistas y dramáticos porque de no serlo hubiese de estallar nuestra coraza.
Pero en el fondo estamos solos, estamos con E de estupido, con E de esperanza...con E de Empezar, siempre, cada vez, a cada rato, cada día en la incursión de nuestro propio universo.
Estas 7 pequeñas maravillas que no son más que recovecos de las esquinas donde nunca sabremos doblar, esas esquinas en la que se nos cuelga la sonrisa. En la ciudad desnuda que nunca terminaremos de conocer.
Somos humanos y seres divinos de un Edén que no sabemos dónde quedó. Exiliados de nuestro propio secreto. Complejos, con tantas ideas, con pocas herramientas para hacerlas claras, pero si con herramientas que nos habrán de matar sofisticadamente...nuestras pasiones son siempre encaminadas a nuestra propia destrucción, ya sabes: "todo lo que nos hace bien nos hace mal"...somos necios, narcisistas, hedonistas y dramáticos porque de no serlo hubiese de estallar nuestra coraza.
Pero en el fondo estamos solos, estamos con E de estupido, con E de esperanza...con E de Empezar, siempre, cada vez, a cada rato, cada día en la incursión de nuestro propio universo.
hablando de pulidas
En mi corta pero profunda experiencia en el trabajo de pulir superficies que deberían ser brillantes (de vez en vez pulo una moto y algunos carros de mi familia), llego a un punto de reflexión:
Las ideas por muy individuales que sea están hechas para brillar y todo lo que, en su naturaleza, se crea para brillar requiere, a su vez, de una o más miradas para apreciar y ver el porque de su brillantez. Una idea brilla por el simple hecho de que es humana (si los perros tuvieran ideas no serian los mejores amigos del hombre). NO debe haber ningun argumento más que el de compartir y curioso las ideas nos han separado a todos los hombres, pero también unido. Una idea es un trofeo de nuestra condición humana, no intelectual, ni comercial, ni política, ni artística, eso vino después...es decir tener y mostrar nuestras ideas es un quehacer elemental y esencialmente humano (de no haber sido por eso Platón hubiese escuchado a su mujer y hubiese dejado de "perder el tiempo en las plazas hablando de cosas que nadie entiendía").
Cuando el mercado crece tanto en nuestro mundo cotidiano, nos damos cuenta que todo, al venderse se puede comprar, incluyendo nuestras ideas, tanto el cómo las pulimos para que sean brillantes, como en aguzar nuestra mirada para saber ver y apreciar los muchos brillos en ésta ecología de ideas que somos en el devenir humano.
Es curioso que al hombre le paguen por pensar, por hablar de sus ideas. POr un lado en la idea de fuerza laboral es necesario que se le pague a alguien por pensar, pero por otro lado, y entendiendo la complejidad del desarrollo tecnológico, la calidad y el proceso natural en el que elaboramos las ideas no tiene comparación en ninguna tecnología creada por el hombre y por lo tanto el pensar termina siendo algo tan precioso tan incosteable por cualquier empresa. Es así como el hombre se vuelve temático, tiene que tener un pretexto para pensar. Por eso definitivamente terminan pagándonos por pensar en lo que las empresas quieren que pensemos, en sus temas, en sus prioridades. Creo que Platón y todos aquellos antiguos filósofos se impresionarían del tipo de pensamiento por el que pagan ahora?: Una empresa te dice en qué pienses y si te pareces más en la forma de la empresa (de mentes domesticadas que saben decir y callar según los parámetros institucionales) y les dices lo que quieren oir entonces eres un muy buen empleado, un buen ciudadano. Foucault dijo que había mucho justo entre el callar y el decir de los que creen que saben (el poder se define por eso en saber cuando y porque decir y cuanod y porque callar), de esos nuevos intelectuales que desprecian la academia sin haber estado en ella, de esos que piensan para las marca y por las marcas y ellos (nosotros) terminamo siendo una marca. De esos que piensan en horas de oficina y que ven en cualquier interlocutor o un posible cliente que le compre su ideas o un "pirata" que le robe lo más preciado que tiene dentro de la estadística de lo "económicamente activo". Y entonces hay que cuidar la información!!!!!....porque eso es dinero.
Cierto hay quienes piensan que ese es su trabajo y pulen y arrullan sus ideas como algo que tienen precio y hay que saber venderlas. Y hay quienes trabajan en su ideas y las pulen y las arrullan porque saben que sus ideas no tienen precio y hay que saberlas compartir.
Y todo termian en parceles de información tan limitadas como las miradas de nuestro nuevo y tecnológico oscurantismo.
Las ideas por muy individuales que sea están hechas para brillar y todo lo que, en su naturaleza, se crea para brillar requiere, a su vez, de una o más miradas para apreciar y ver el porque de su brillantez. Una idea brilla por el simple hecho de que es humana (si los perros tuvieran ideas no serian los mejores amigos del hombre). NO debe haber ningun argumento más que el de compartir y curioso las ideas nos han separado a todos los hombres, pero también unido. Una idea es un trofeo de nuestra condición humana, no intelectual, ni comercial, ni política, ni artística, eso vino después...es decir tener y mostrar nuestras ideas es un quehacer elemental y esencialmente humano (de no haber sido por eso Platón hubiese escuchado a su mujer y hubiese dejado de "perder el tiempo en las plazas hablando de cosas que nadie entiendía").
Cuando el mercado crece tanto en nuestro mundo cotidiano, nos damos cuenta que todo, al venderse se puede comprar, incluyendo nuestras ideas, tanto el cómo las pulimos para que sean brillantes, como en aguzar nuestra mirada para saber ver y apreciar los muchos brillos en ésta ecología de ideas que somos en el devenir humano.
Es curioso que al hombre le paguen por pensar, por hablar de sus ideas. POr un lado en la idea de fuerza laboral es necesario que se le pague a alguien por pensar, pero por otro lado, y entendiendo la complejidad del desarrollo tecnológico, la calidad y el proceso natural en el que elaboramos las ideas no tiene comparación en ninguna tecnología creada por el hombre y por lo tanto el pensar termina siendo algo tan precioso tan incosteable por cualquier empresa. Es así como el hombre se vuelve temático, tiene que tener un pretexto para pensar. Por eso definitivamente terminan pagándonos por pensar en lo que las empresas quieren que pensemos, en sus temas, en sus prioridades. Creo que Platón y todos aquellos antiguos filósofos se impresionarían del tipo de pensamiento por el que pagan ahora?: Una empresa te dice en qué pienses y si te pareces más en la forma de la empresa (de mentes domesticadas que saben decir y callar según los parámetros institucionales) y les dices lo que quieren oir entonces eres un muy buen empleado, un buen ciudadano. Foucault dijo que había mucho justo entre el callar y el decir de los que creen que saben (el poder se define por eso en saber cuando y porque decir y cuanod y porque callar), de esos nuevos intelectuales que desprecian la academia sin haber estado en ella, de esos que piensan para las marca y por las marcas y ellos (nosotros) terminamo siendo una marca. De esos que piensan en horas de oficina y que ven en cualquier interlocutor o un posible cliente que le compre su ideas o un "pirata" que le robe lo más preciado que tiene dentro de la estadística de lo "económicamente activo". Y entonces hay que cuidar la información!!!!!....porque eso es dinero.
Cierto hay quienes piensan que ese es su trabajo y pulen y arrullan sus ideas como algo que tienen precio y hay que saber venderlas. Y hay quienes trabajan en su ideas y las pulen y las arrullan porque saben que sus ideas no tienen precio y hay que saberlas compartir.
Y todo termian en parceles de información tan limitadas como las miradas de nuestro nuevo y tecnológico oscurantismo.
Secreto místico
Los hombres mueren porque no saben y no pueden unir el principio y el fin de todas las cosas
Reto o halago
Hay quien ve en la ruptura de la comodidad o un reto o un halago o una complot del universo a su tranquilidad. Hay quien en el centro de su universo puede creer que el universo ajeno, ese, el exterior, complota para señalar lo abollado de su aureola o, en su defecto, lo brillante que suele ser.
Reto o Violencia, es una cuestión en medio de todo este relativismo practicado y asumido.
Pero hay quienes en su día, cuando apagan su computadora, también apagan su cerebro.
Reto o Violencia, es una cuestión en medio de todo este relativismo practicado y asumido.
Pero hay quienes en su día, cuando apagan su computadora, también apagan su cerebro.
lunes, mayo 22, 2006
Secreto
Ese papel hecho pelota, primero le pego en la cabeza y luego en el pecho, donde suponía que se hallaba el corazón, la miss no había llegado a ese tema, tan pertinente ahora, en la clase. Al desdoblar ese papel que dejaba ver garabatos en forma de corazón y palabras, le pareció el tesoró más escondido que entre sus manos torpes y ansiosas se hundía más en su escondite. El ruido atroz de la voz de la miss empezó a enmudecer conforme extendía en su mesabanco ese pergamino que se le antojaba indescifrable. Leyó y supo que Manuelito había sido el creador de esas letras apenas comprensibles, el arrogante usuario de unas palabras que le pertenecían no por saberlas escribir sino por que de algun extraña manera ella sentía sus torpes trazos en cada línea caóticamente dibujada.
Algo le nació ese día, el día en que Lupita guardo en su mochila de Barbie su primer secreto.
Algo le nació ese día, el día en que Lupita guardo en su mochila de Barbie su primer secreto.
Un cuento
Érase un hombre que jugaba con las palabras y era feliz, pero como aquel hombre que jugó alguna vez con el fuego y se quemó, nuestro hombre se dió cuenta que las palabras eran caprichosas y sumamente fascinantes. Pero no se quemó, tuvo la conciencia de que las palabras eran seres vivos, libre e independientes. Y se dejó vestir por ellas, vivió en constante enamoramiento, terminó definido por ellas.
Donde algunos veían hadas ese hombre veía palabras, algunas tenían alas, otras no, pero todas volaban y su vuelo lo estremecían tanto que una estrella nacía cada vez que él sonreía.
Donde algunos veían hadas ese hombre veía palabras, algunas tenían alas, otras no, pero todas volaban y su vuelo lo estremecían tanto que una estrella nacía cada vez que él sonreía.
Postal
Necesitas mucho. Pobre, pobre de verdad.
Nada es suficiente, eso te excluye de esa palabra de la que tanto huyes. Pero hey, sólo es una estúpida palabra que por estar en un diccionario sigue sienda relativa. Esa palabra de la que huyes y que a veces ves encarnada en mi, no te va a hacer nada. La palabra mediocridad no se olvida.
Desde hace tiempo dejé de ser algo que en mi redondéz existecial bastara para hacerte sentir en paz. Yo represento todo lo que te hace falta, no lo que ya tienes.
Necesitas mucho.
Nada es suficiente, eso te excluye de esa palabra de la que tanto huyes. Pero hey, sólo es una estúpida palabra que por estar en un diccionario sigue sienda relativa. Esa palabra de la que huyes y que a veces ves encarnada en mi, no te va a hacer nada. La palabra mediocridad no se olvida.
Desde hace tiempo dejé de ser algo que en mi redondéz existecial bastara para hacerte sentir en paz. Yo represento todo lo que te hace falta, no lo que ya tienes.
Necesitas mucho.
el día
Es curioso. Hoy me levanté pensando que podría ser un buen día (no hubo pinguinos en mi refrigerador, ni pasajeros del metrobus que me reflejaran alguno de mis sueños, ni sonrisas y besos en una regadera). Mientras pasa el tiempo, esa cascada cotidiana de horas que nos hacen pensar que el día avanza me doy cuenta de que no lo es y seguramente terminará siendo un ingenuo pretexto que yo mismo le inventé a mi cuerpo para que se levantara y caminara al baño con ese pequeño sesgo de autocomplacencia.
Falsa alarma. Hace tiempo que ese día que soñé como "el día" sigue siendo un autoengaño que mi cuerpo, creo, sigue reprochandome cada día.
Falsa alarma. Hace tiempo que ese día que soñé como "el día" sigue siendo un autoengaño que mi cuerpo, creo, sigue reprochandome cada día.
decepción
Tristemente me he dado cuenta de que por andar buscando lo excepcional y lo maravilloso en otros se me olvido buscarlo en mi. Ahora darme cuenta de lo excepcionalmente convencional que soy yo me hace sentirme doblemente triste al levantar y reconectar mi mirada exterior y darme cuenta de que lo que yo creía excepcional no es más que un intento desmanojado y pueril, inutil y poco profundo de ser "distinto".
Ratifico la idea de que dejaré de criticar a mi más cercano enemigo pues sé que terminaré pareciéndomele más temprano que tarde.
Ratifico la idea de que dejaré de criticar a mi más cercano enemigo pues sé que terminaré pareciéndomele más temprano que tarde.
mentiras y verdades
El gran dilema en nuestros días en los que la verdad ya no se busca si no que se muestra de múltiples y variadas maneras es el de saber qué hacer con ella, esta dialéctica de lo verdadero. El saber lo que otros no saben, no no hace ser mejores, ni afortunados, nos hace simplemente piezas pequeñas del complot más impresionante que el mismo universo ha hecho para recrearse: hacerse más observable a través de nuestros propios ojos. La verdad no es la que se dice cada día, dando cuenta de lo que se hace o no, de lo que se dice o lo que se siente. La verdad no existe como tal. La verdad es, ahora, una cuestión política (en el sentido util de la palabra)y no una cuestión moral ya que la naturaleza vital de la verdad es la de cambiar, renovar y revolucionar este mundo enturbiado y nublado por la poca claridad. El gran dilema es saber qué hacer con lo que podemos comprender con lo que descubrimos como verdad pues la verdad sólo existe hasta que se hace acción. El gran dilema es saber en dónde encajan los pedazos de verdad que vamos recolectando a cada paso que damos. Diría Silvio, "la mentira se aprende enseguida, la verdad nos cuesta la vida".
Y sin embargo no se trata de decir la verdad, sino de saber decirla.
Y sin embargo no se trata de decir la verdad, sino de saber decirla.
extraviado
Y el eco es anterior a las voces que lo producen;
Ya que ni siquiera tenemos el consuelo de un caos
En el jardín que bosteza y que se llena de aire,
Un rompecabezas que es preciso resolver antes de morir
Para poder resucitar después tranquilamente
Cuando se ha usado en exceso de la mujer;
Ya que también existe un cielo en el infierno,
Dejad que yo también haga algunas cosas:
Yo quiero hacer un ruido con los pies
Y quiero que mi alma encuentre su cuerpo.
(Parra)
Ya que ni siquiera tenemos el consuelo de un caos
En el jardín que bosteza y que se llena de aire,
Un rompecabezas que es preciso resolver antes de morir
Para poder resucitar después tranquilamente
Cuando se ha usado en exceso de la mujer;
Ya que también existe un cielo en el infierno,
Dejad que yo también haga algunas cosas:
Yo quiero hacer un ruido con los pies
Y quiero que mi alma encuentre su cuerpo.
(Parra)