el día
Es curioso. Hoy me levanté pensando que podría ser un buen día (no hubo pinguinos en mi refrigerador, ni pasajeros del metrobus que me reflejaran alguno de mis sueños, ni sonrisas y besos en una regadera). Mientras pasa el tiempo, esa cascada cotidiana de horas que nos hacen pensar que el día avanza me doy cuenta de que no lo es y seguramente terminará siendo un ingenuo pretexto que yo mismo le inventé a mi cuerpo para que se levantara y caminara al baño con ese pequeño sesgo de autocomplacencia.
Falsa alarma. Hace tiempo que ese día que soñé como "el día" sigue siendo un autoengaño que mi cuerpo, creo, sigue reprochandome cada día.
Falsa alarma. Hace tiempo que ese día que soñé como "el día" sigue siendo un autoengaño que mi cuerpo, creo, sigue reprochandome cada día.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home