INCONTINUUM

viernes, diciembre 23, 2005

un juego sin terminar

El niño que se enamoró tan perdidamente, tan libremente y tan lleno de esperanza hoy se rinde. Se cansó de promesas postergables, intercambiables por "situaciones más propicias", se va un poco aburrido de esperar -alguien decía que un niño puede esperar 5 minutos para ver si pasa algo mágico-. Dejó una nota y un juego sin terminar.
¿Dónde están los locos?