INCONTINUUM

jueves, febrero 02, 2006

postal urbana 1

HOy, sin más preámbulos quisiera ser optimista. Pero inevitablemente caigo en cuenta que serlo en estos días es verdaderamente un lujo. Pero digamos que hoy simplemente podemos tratar de colgarnos de una esperanza como ese peatón que me impresionó por irse colgado de un pesero que no lo esperó. Con todo su cuerpo sangoloteándose pude ver los tamaños y la vehemencia de la destreza chilanga. POr eso, creo, que puedo intentar ser optimista ante tales metáforas urbanas que no dejan de sorprenderme.
Dijera un anuncio de coca-cola, lo bueno del D.F. es que aquí sí queremos a los chilangos.