INCONTINUUM

lunes, septiembre 05, 2005

Mensaje directo

¿A quién tienes detrás de ti? ¿Quién cuida tus pasos sin que sientas que alguién va junto a ti? ¿De quién es la mano que te ayuda a levantar cuando hay algun resbalo? ¿Quién es el que cuida tus espaldas?...A quién recurres cuando estás solo, a quién clamas...Ciertamente cada quién responde según su construcción, en esta respuesta viene implícita la propia historia...de donde venimos, con quién y hacia dónde.
Hay una historia en cada intento de respuesta. La mia, la nuestra, es simple: hay amor y en el proceso nos damos cuenta de que no es nada fácil, hay decisiones, confrontaciones pero siempre el reajuste luminoso de la posibilidad. Pero hay, si lo hay un presupuesto espiritual en le cual descansamos.
¿Y quién pudo hacer algo contra eso?...estrategias, complots, acusaciones?...con nuestras humanidades tenemos para darnos cuenta que lo imperfecto es humano y si vemos hacia afuera es para compartir la luz que nos alumbra y las cosas que aprendemos. Perfectamente imperfectos espiritualmente perfectibles.

Son alas de luz las que revolotean justo cuando piensas que son duras las noches, cuando hay algo que te carcome y hace circular tu sangre...justo en ese momento en el que piensas que no puedes hacer nada es una mano sin discursos ni alardeos la que te mantiene tan lejos siendo el mejor de los espectadores de un milagro que no tuviste mirada para ver. Sigue dándole cuerda a eso que piensas que es un corazón, ese juguete necesita de otro tipo de motivaciones. Sigue avivando ese odio, minando las rutas que te van dejando mas en desasosiego y si esa sigue siendo tu decisión y tu razón de vida cree en lo imperdonable, pero también en la posibidad del perdón donde radica la semilla de la libertad y el cambio, en ese momento en el que se oscurece más, la luz es más intensa.
Esta luz también es para eso, para alumbrar las obscuridades que nos persiguen y aunque no lo quieras, incluso, para alumbrarte. No serás un fantasma, no estas invitado tampoco, ni una amenaza, ni una historia para enterrar. Eres tú en una transformación necesaria, comprensible y ese es tu lugar. Hay conciencia de ti en esta luz y en ella sólo puedes existir iluminado, esa es nuestra decisión.
Y tú, qué decides?