INCONTINUUM

lunes, diciembre 10, 2012

Y bien. Veamos qué podemos ir diciendo después de mi 1 año y medio de entrenamiento como papá. Creo que después de todo esto puedo empezar a decir algo, ojo no porque no hubiese tenido nada qué decir sino porque creo que este año me permitió ir juntando varios aprendizajes.
Lo único que puedo decir es que Mateo, de quien en siguientes entradas ya estaré hablando, es un catalizador de vida, un milagroso regalo que ha venido a darle un nievo giro a mi vida y al de su mamá (en consecuencia de los 2) y definitivamente estoy orgulloso de ser su padre.
Lo que viene es una faceta distinta...y por consecuencia una nueva forma de ir narrando mi vida.