Las cosas

Hoy cargaré con la pequeña idea de que soy prescindible. Haré lo que normalmente hago mirando de soslayo esa lucidéz que se presume inocente, pero que nunca lo es. Esto de trabajar en casa suele ser peligroso por que tienes toda tu vida recordándote a cada instante que es mejor cuando no se está aqui. Los libros se han acostumbrado a esa paz diurna, los discos recatan su silencio. Y todo, todo me hace entender que a veces las cosas se acostumbran a nuestra ausencia. Sin tan solo me olvidara que estoy en mi casa empezaría a tener esa sensación de "estar trabajando" en la que sentirse observado y evaluado es esa invisible fuerza que nos hace estar tan bien portados en alguna oficina.